The Curse of La Llorona: La Llorona 1130

María, una joven proveniente de una familia de bajos recursos que vivía en un remoto pueblo de motanaña, se enamoró un noble rico. Tras casarse y tener dos hijos, el joven la abandonó dejándola sola con los niños.
María sufrió y se desesperó por esa traición. Perdió locamente la razón, llevó a sus dos hijos a las orillas del Río Grande. Los ahogó en un ataque de rabia ciega. Cuando se calmó, María se dio cuenta de las terribles acciones que había cometido, buscó los cuerpos de los niños, pero esos cuerpos fueron arrastrados por el Río Grande. Unos días después, María se suicidó en el mismo lugar donde ahogó a sus hijos. La historia cuenta que el alma de María no se libera hasta que encuentre a sus hijos. Atrapada entre lo mundano y el inframundo, deambula en busca de sus hijos perdidos. María a menudo llora por sus hijos, lo que es escuchado por los lugareños y desde entonces, María es conocida como La Llorona. Vaga por el mundo para secuestrar niños por la noche, niños que confunde con los suyos. La Llorona pide perdón a Dios y ahoga hasta la muerte a los niños que secuestra. Acompañada de llantos, La Llorona se lamenta: "¡Ay, mis hijos!", "¡Oh, hijos míos!". La Llorona a menudo vaga por el río o el arroyo para encontrar a sus hijos.